La gente en Occidente piensa de los espacios sagrados que son lugares designados como santos, iglesias o templos, o tal vez un lugar hermoso en la naturaleza. El chamán entiende que él o ella puede crear un espacio sagrado en cualquier lugar y en cualquier momento, al centrar la atención y el poder de convocar a los cuatro puntos cardinales y la Madre Tierra y el Sol Padre. De este modo, el sabio es capaz de entrar en relación con los cuatro principios chamánicos de organización del mundo: Sur como el lugar de la serpiente; Oeste como el lugar del jaguar, del Norte como el lugar de los colibríes, y el Este como el lugar del águila. Los sabios creen que estos arquetipos de origen animal son más que símbolos, son energías primordiales con cualidades y poderes propios. Cada uno de estos animales pueden ser vistos como la representación de una de las cuatro fuerzas fundamentales de la naturaleza, descripta por la física como las fuerzas de la gravedad, el electromagnetismo, la fuerza nuclear fuerte y débil. Los biólogos también reconocen que toda la poesía de la vida está escrita con un alfabeto que contiene sólo cuatro letras: las cuatro letras o pares de bases, del ADN. La única diferencia entre el punto de vista chamánico, de la física y del biológico es que los sabios creen que pueden convocar e interactuar con estas fuerzas de la naturaleza, efectivamente en comunión con la biosfera. Por esta razón, los chamanes siempre comienzan sus meditaciones y ceremonias mediante la creación de un espacio sagrado. Incluso si usted no usa las palabras en la oración a continuación, dirigase a cada uno de los cuatro puntos cardinales y sienta una conexión con cada uno de los arquetipos de los animales. Ayude a su cerebro, educadoy lógico, a entender que estas son personificaciones de las antiguas fuerzas de la naturaleza. A medida que se da permiso para conectarse con las cuatro direcciones cardinales, el cielo y la tierra, imagine la red luminosa que lo conecta con la naturaleza y toda la vida. El espacio sagrado es santo y seguro. Usted puede imaginarlo como una cúpula brillante por encima de la sala en la que se encuentra. Este es un espacio tangible, donde usted puede bajar las defensas de su cerebro más viejo, es un lugar donde usted puede elevarse por encima de su conciencia depredadora. Usted puede notar que los demás sienten la tranquilidad y la belleza de este espacio, también, como se desactiva el conflicto y hace la conversación fácil y significativa. Crear un espacio sagrado es un experimento en el poder de la intención que le permite convocar a las facultades curativas de la naturaleza y entrar en una relación correcta con todas las fuerzas de la creación.
«Perdonar», como indica su etimología, significa dar en plenitud porque expresa una forma de amor llevada hasta el extremo: amar a pesar de la ofensa sufrida. Gracias a una «pasividad activa», estará atento a la acción del Espíritu que sopla donde quiere y cuando quiere.
El perdón, en su fase última, no conoce la suficiencia del ‘te Perdono’, sino que se hace discreto, humilde, incluso silencioso.
El perdón plantea un auténtico desafío ya que integra simultáneamente dos universos: el humano y el divino El Perdón no es cosa de Dios ya que no acontece sin la cooperación humana.
«Los santos de Bernanos descienden al abismo de esta 'dulce piedad'. El perdón es Dios mismo, el Padre misericordioso del hijo pródigo, el Amor en su pura gratuidad. El Amor es creador, se difunde fuera de si, y el perdón es el instrumento de la creación continua, restaurada y renovada. Allí donde los hombres engendran la muerte, él hace resurgir la vida» (Perrin 1987: 237)..
Miguel Rubio dice con toda su originalidad: «Perdonar no es un gesto rutinario muy extendido, no es una costumbre cotidiana, sino más bien una flor oculta, original, que florece en cada ocasión sobre una base de dolor y victoria sobre uno mismo»
He aquí un ejercicio que pueda servirte:
Date tiempo para entrar en ti mismo y acercarte a tu mundo simbólico y sagrado. Si te sirve de ayuda, cierra los ojos.
Estás en un campo de flores bañado por el sol. Tómate tiempo para contemplar el paisaje y disfruta el frescor del lugar.
Allá a lo lejos, ves una casa rodeada de una luz especial. Te diriges hacia ella. Descubres una escalera de piedra que conduce al sótano. Bajas uno a uno los siete escalones. Ahora estás ante una puerta maciza de roble delicadamente tallada. La curiosidad te impulsa a abrir la puerta y entrar. Te encuentras en una habitación iluminada por una extraña luz. Con gran asombro, ves a un doble tuyo atado a una silla. Examina detenidamente tus ataduras. ¿Qué partes de tu cuerpo están atadas?; ¿qué clase de ataduras las sujetan?; ¿de qué material están hechas? Empiezas a darte cuenta de que la ofensa sufrida te mantiene atado. Poco a poco vas comprendiendo que eres tú el que está ahí, amarrado a la silla. Entras en ti mismo para unificarte con la persona encadenada.
Después te das cuenta de que no estás solo en la habitación; notas la presencia de un ser poderoso. Reconoces a Jesús que te pregunta: «¿Quieres que te ayude a liberarte?». Sorprendido por su ofrecimiento, te repites la pregunta: «¿Quiero realmente ser liberado?; ¿qué va a ser de mí sin mis cadenas?; ¿podré soportar ese nuevo estado de libertad?; ¿qué ventajas puedo sacar de mi situación de prisionero?'». Debate unos momentos estas importantes cuestiones.
Si quieres ser liberado, manifiéstaselo a Jesús. Háblale de las ataduras que te inmovilizan y te impiden perdonar a tu ofensor. A medida que vayas identificando cada uno de los obstáculos al perdón, observa cómo Jesús deshace poco a poco tus ataduras.
Cada vez que sea liberada una parte de tu cuerpo, saborea el alivio que te proporciona tu nueva libertad. A medida que las ataduras se vayan soltando, deja que la armonía, la serenidad y la paz invadan todo tu ser.
En este estado de gracia en que te sientes habitado por el amor divino, mira cómo se acerca a ti a la persona que te ha ofendido. ¿Empiezas a darte cuenta de que algo ha cambiado en ti? Mira a los ojos a esa persona. ¿Te sientes capaz de decirle «te perdono» con toda sinceridad? Si puedes, hazlo. Si no, vuelve a ti mismo y pregúntate qué ligaduras te siguen atando. Puedes reanudar el diálogo con Jesús para pedirle que te libere de los últimos obstáculos al perdón. También puedes terminar aquí y reemprender en otro momento este mismo ejercicio de imaginación, con el fin de llegar más lejos en la vía del perdón. Llegará un día en que, para tu sorpresa, el perdón brotará espontáneo de tu corazón.(comoperdonar.tk)
Recuerda que no hay otro que no seas Tu. Y en el reconocimiento de Tu Hermano está implícito el perdón que es perdonarte a Ti mismo. Por eso se dice que es un camino de Liberación.
Por una parte y como sabemos, está el reconocimiento de que nuestro nacimiento y las circunstancias de vida que mantenemos actualmente se ajustan necesariamente a nuestras acciones pasadas: lo que hicimos, reprimimos, omitimos y dimos; Si bien, no podemos desligarnos de tener que saldar nuestros errores pasados, tenemos la posibilidad de reducir el impacto de nuestras acciones, atenuando un poco sus efectos, mediante la creación consciente de buen karma.
En cierta oportunidad y hablando del karma una persona trajo a la luz la importancia de crear karma ilimitado. Con un ejemplo puede verse más claro.
Si por ejemplo sientes el deseo de colaborar o donar a una fundación u organización altruista. Y dentro de tus posibilidades puedes donar de forma material o económica, es necesario que nos demos cuenta, que el acto no se detiene con la entrega material del objeto o dinero; Sus efectos redundarán en ti, de acuerdo al manejo que diste a esta oportunidad de servir que tuviste en tus manos.
Por ejemplo usemos el caso que donaste una aspiradora, entonces, será como si ilimitadamente limpiaras ese lugar, cada vez que alguien la ponga en funcionamiento; así y de tan de largo alcance será tu acción. Es como estar en persona haciéndolo. Por este motivo es crucial tener una consciencia ilimitada, que permita beneficiar al mayor número de personas posibles a partir de un acto.
Otro ejemplo puede ser el siguiente:
Conoces a una persona que tiene un espíritu colaborador, altruista, donador y al tiempo notas también que requiere algún tipo de instrucción particular, en este caso obsequiarle a esa persona un curso que lo capacite y le dé la oportunidad de compartir sus competencias, hará que lo que el traiga en beneficio a otros seres, y al tiempo lo traerá en retorno a ti, de forma ilimitada.
Es de esta forma como el acto de compartir, donar y servir se vuelve más ilimitado. Poniendo en manos de donadores, tierra fértil, semillas que darán más frutos.
Si mantuviéramos en nuestra memoria que estamos creando nuestro nacimiento futuro, seriamos realmente más consciente de nuestros actos, de lo bueno, de lo malo, de todo lo que hacemos en el día; Es en el Hoy, que estamos integrando, nuestro pasado, presente y jugándonos nuestro futuro.
Cuento Zen Había una vez un cantero que estaba insatisfecho consigo mismo y con su posición en la vida. Un día pasó por la casa de un rico comerciante. A través de la entrada abierta, vio muchas finas posesiones e importantes visitantes. "¡Cuán poderoso debe ser el comerciante!", pensó el cortador de piedra. Se puso muy envidioso y deseó que pudiera ser como el comerciante. Para su gran sorpresa, se convirtió repentinamente en el comerciante, gozando de más lujos y poder de lo que siempre había imaginado, pero envidiado y detestado por aquellos menos ricos que él.
Pronto un alto funcionario pasó cerca, llevado en una silla de manos, acompañado por asistentes y escoltado por soldados batiendo gongos. Todos, sin importar cuan rico, tenían que hacer una reverencia ante la procesión. "¡Cuán poderoso es ese funcionario!", pensó. "¡Deseo que pudiera ser un alto funcionario!".
Entonces se convirtió en el alto funcionario, llevado por todas partes en su bordada silla de manos, temido y odiado por la gente de todo alrededor. Era un día caluroso de verano, por eso el funcionario se sentía muy incómodo en la pegajosa silla. Levantó la mirada al sol. Brillaba orgulloso en el cielo, no afectado por su presencia. "¡Cuán poderoso es el sol!" pensó. "¡Deseo que pudiera ser el sol!".
Entonces se convirtió en el sol, brillando ferozmente sobre todos, abrasando los campos, maldecido por los granjeros y los trabajadores. Pero una enorme nube negra se interpuso entre él y la tierra, de modo que su luz no pudo brillar más sobre todo allá abajo. "¡Cuán poderosa es esa nube de tormenta!", pensó. "¡Deseo que pudiera ser una nube!".
Entonces se convirtió en la nube, inundando los campos y las aldeas, increpado por todos. Pero pronto descubrió que estaba siendo empujado lejos por cierta gran fuerza, y se dio cuenta de que era el viento. "¡Cuán poderoso es!", pensó. "¡Deseo que pudiera ser el viento!".
Entonces se convirtió en el viento, llevándose tejas de los techos de las casas, arrancando árboles, temido y odiado por todos debajo de él. Pero después de un rato, se izó en contra de algo que no movería, no importa cuan fuertemente soplara en contra de ella, una enorme y altísima roca. "¡Cuán poderosa es esa roca!", pensó. "¡Deseo que pudiera ser una roca!".
Entonces se convirtió en la roca, más poderosa que nada más en la tierra. Pero mientras estaba parado allí, oyó el sonido de un martillo golpeando un cincel en la dura superficie, y sintió que estaba siendo cambiado. "¿Qué podría ser más poderoso que yo, la roca?", pensó. Bajó la mirada y vio lejos debajo de él, la figura de un cantero.
Tenemos el poder de elegir ciertamente, pero eso no se reduce al color de la ropa que usamos ni a la comida que nos apetece.
Ni siquiera a los amigos que tenemos, donde pasamos las vacaciones o que clase de trabajo queremos hacer
No, es mucho mas que eso, tenemos el poder de elegir como experimentamos esta realidad, el verdadero poder esta en elegir la actitud con que enfrentamos los conflictos y las emociones que día a día se nos presentan.
Podemos hacer caso al ego y tomarnos los pequeños o grandes contratiempos de nuestra vida como algo personal, algo que esta ahí para hacernos la vida imposible y regocijarnos en nuestra desgracia para que todo el mundo sepa lo dura que es nuestra vida.
Esta es una opción del todo valida puesto que si así lo elige alguien es porque esta en su derecho de elegir.
Otra opción es ver lo que nos sucede como algo ajeno a nosotros, algo que no afecta a nuestro YO interno y extraer la enseñanza que la experiencia nos trae, ver las cosas con cierta distancia, sabiendo que nada de este mundo nos puede dañar, que todo lo que ocurre tiene un porque y que muy probablemente necesitamos experimentar esto para nuestro mejor entendimiento.
Optando por este enfoque, por esta elección, cualquier cosa que estemos viviendo en esta realidad nos sera útil para nuestro aprendizaje, no distraeremos nuestro trabajo interior con pensamientos y aun actos inútiles de venganza, represalias o recompensas.
Simplemente atravesaremos la experiencia en paz y en paz entenderemos su significado.
Esto ademas de aportar bienestar emocional, también nos trae bienestar físico ya que la mayoría de las enfermedades están causadas por conflictos no resueltos.
Si no creamos conflicto no hay nada que resolver.
En definitiva TU ELIGES como vives la experiencia y como la integras en tu vida.
Les dejo este Trabajo único. Transmutación, equilibrio y sanación dividido en 3 partes, muy importante para todos los que han perdido el equilibrio del cuerpo y han caido en la enfermedad es una transmutación para salir de la enfermedad y volver al equilibrio de la sanación, con todo mi amor se los dejo para que trabajemos juntos como siempre y los abrazo en luz de amor y paz desde el alma Helen.