En 1891 en la ciudad de Brno, Moravia, cerca de Dolni Vestonice, se descubrió el enterramiento de un hombre que iba acompañado de un extraordinario ajuar funerario; dicho ajuar incluía una escápula de mamut, colmillos, dientes de caballo, así como las costillas y el cráneo de un rinoceronte lanudo. También estaba acompañado de 600 conchas del tipo Dentalium, dos grandes discos perforados de piedra y catorce discos más pequeños realizados sobre diversas materias primas. Pero lo más asombroso de todo fue la recuperación de tres piezas de marfil de mamut talladas, que representaban la cabeza, el cuerpo y el brazo izquierdo de una marioneta con una antigüedad de unos 26.000 años. La cabeza y el cuerpo de la marioneta miden en su conjunto 20,3 centímetros de largo, y son visibles los agujeros para hacer pasar los hilos para atar las piernas de la marioneta al resto del cuerpo. (Ref. Las Sociedades Paleolíticas de Europa,Gamble 1999).
Un grupo de científicos ha descubierto los fósiles de una criatura marina de 520 millones de años, con extremidades bajo su cabeza. Un reciente estudio del material encontrado revela que es uno de los fósiles animales más antiguos jamás encontrados. Los biólogos encontraron los restos durante una expedición en una zona rica en fósiles del suroeste de China, cerca de Kunming, llamado Xiaoshiba, informa Live Science. Los antiguos restos de esta especie de animales, un artrópodo llamado Fuxhianhuia, tienen vestigios del sistema nervioso más primitivo que se halla desarrollado más allá de la cabeza. Los biólogos creen que la criatura pudo haber utilizado las extremidades para empujar la comida hacia su boca, mientras se arrastraba por el fondo marino.
Una jubilada en Smyrna llevó la sorpresa de su vida recientemente, de los que menos posibilidades tienen en esos lugares. Betty LeMaster descubrió que la roca que había estado utilizando como tope de puerta durante 16 años, era en realidad un fósil de coral de 450 millones de años de antigüedad. LeMaster encontró una piedra única en su jardín hace más de una década, "pero siempre pensé que había algo más que eso." dijo Después de que su marido le aseguró que era probablemente nada más que una roca de apariencia única, decidió mantenerlo, y lo utilizan como un tope de puerta interior de su casa. Sin embargo, recientemente, dice mientras ella estaba viendo un episodio de la serie de televisión geológico "América Unearthed", pensó en enviar la roca a un geólogo para encontrar información sobre él.
Bautizado como Mauritia y escondido bajo las islas Reunión y Mauricio, se desprendió hace 60 millones de años de Madagascar La islas Reunión y Mauricio, ambos destinos turísticos bien conocidos, esconden algo completamente inesperado. Científicos han encontrado el fragmento de un antiguo continente desprendido hace 60 millones de años mientras Madagascar y la India se separaban. Conocido como Mauritia, permanecía escondido debajo de enormes masas de lava. Estos micro-continentes en los océanos parecen ocurrir con más frecuencia de lo que se pensaba, según un estudio publicado en la última edición de la revista Nature Geoscience.La ruptura de los continentes se asocia a menudo con columnas eruptivas. Burbujas gigantes de roca caliente que suben desde el manto profundo y ablandan las placas tectónicas hasta el punto de que estas no lo resisten más y se acaban fracturando. Así es como la parte oriental de Gondwana, un supercontinente surgido hace 600 millones de años, comenzó a fracturarse en el período jurásico y se separó hace unos 170 millones de años. Esto dio lugar a la formación de Madagascar, India, Australia y la Antártida, que luego migraron a su posición actual.
La sonda Venus Express de la ESA ha realizado un sorprendente descubrimiento: durante un periodo en el que la presión del viento solar era inusualmente baja, la ionosfera de Venus se expandió en su cara nocturna, como si se tratase de la cola de un cometa. La ionosfera es una de las regiones más altas de la atmósfera, compuesta por partículas con una ligera carga eléctrica. El campo magnético del planeta determina en parte la forma y la densidad de su ionosfera. En el caso de la Tierra, gracias a su fuerte campo magnético, la ionosfera se mantiene relativamente estable ante los cambios en la presión del viento solar. Sin embargo, Venus no tiene campo magnético propio, por lo que la forma de su ionosfera depende de la interacción con el viento solar.
Puede ser uno de los casos cósmicos abiertos más extraños, pero el misterio de 100 años de un gran grupo de bolas de fuego volando en formación a través de la atmósfera de la Tierra está un poco más cerca de ser resuelto, dicen los científicos. Examinando los registros históricos de la procesión de meteoros que tuvo lugar el 9 de febrero de 1913, estos astrónomos detectives reconstruyeron la trayectoria sorprendentemente larga del extraño evento astronómico. Observadores desde Canadá a Brasil vieron como cientos de meteoros atravesaron el cielo, pero no fue ninguna lluvia anual normal de meteoros. Debido a que estos meteoros viajaron casi en paralelo a la superficie de la Tierra, cada trozo de polvo y roca espacial se mantuvo visible por alrededor de un minuto antes de consumirse en la atmósfera de la Tierra. La procesión duró varios minutos. "Para la mayoría de los observadores, la característica más sobresaliente del fenómeno fue el lento y majestuoso movimiento de los cuerpos; y casi igualmente extraordinaria fue la perfecta formación que mantuvieron", dijo Clarence Chant, un astrónomo de la Universidad de Toronto que observó la procesión en 1913.
Asteroides 2, dinosaurios 0. La infame roca espacial que impactó la Tierra y ayudó a limpiarla de los grandes dinosaurios pudo haber sido binaria; dos asteroides orbitándose el uno al otro. Se suele considerar al asteroide dino-asesino como una única roca con un diámetro de 7 a 10 kilómetros, pero en realidad pudo haber sido dos rocas distantes entre sí con ese diámetro combinado. La sorprendente conclusión proviene de una reevaluación de la proporción de los cráteres de asteroides en la Tierra que fueron formados por impactos binarios. También podrían ser malas noticias para quienes esperan proteger nuestro mundo de colisiones catastróficas en el futuro. La Tierra exhibe las cicatrices de impactos de asteroides dobles: los Lagos Clearwater cerca de la bahía de Hudson en Canadá, por ejemplo, son en realidad cráteres gemelos que se formaron hace unos 290 millones de años. Sin embargo, los ejemplos como Clearwater son raros. Solo 1 de 50 cráteres en la Tierra son dobles.
El ocaso de toda una gran ciudad en pleno corazón del imperio estadounidense. Un antiguo símbolo de su poderío industrial y del "sueño americano" donde hoy, sin embargo, se venden viviendas por el precio simbólico de un dólar, ya que nadie quiere habitar el inhóspito silencio de unos barrios abandonados que no tienen electricidad, ni agua, ni policía, ni escuelas. Porciones enteras de la ciudad han muerto. Otras están agonizando. Otras sobreviven, pero lo hacen rodeadas de un creciente marasmo de solares vacíos y calles abandonadas. Al igual que la calavera de Hamlet, el pulido esqueleto de Detroit nos mira con la sonrisa sardónica de los muertos, como queriendo decir "no os lo toméis a mal, amigos, ¡la economía de mercado es así!". La prensa internacional lleva varios años recreándose en el asombro por lo sucedido en la ciudad más grande de Michigan y nosotros no podíamos ser menos, ya que el declive de Detroit es un fenómeno fascinante. Trágico, sin duda, pero fascinante. Primero por las imágenes que ha generado, especialmente en forma de "naturaleza muerta" arquitectónica. Han sido esas fotografías las que han atraído las miradas del mundo hacia una ciudad que llevaba décadas descomponiéndose en silencio. Hace un tiempo causó cierto impacto un reportaje de la revista Time en el que dos fotógrafos franceses - Yves Marchand y Romain Meffre, quienes además publicaron un libro llamado Ruins of Detroit - hacían un repaso a algunos rincones muy representativos de la decadencia de la ciudad. Podíamos ver estaciones de tren, aulas, consultorios de dentista, teatros, polígonos industriales, oficinas, bibliotecas... todos ellos lugares que ahora están vacíos, descascarillados por el tiempo y sumidos en un entrópico desorden. Un fantasmagórico espectáculo de objetos cotidianos a los que ya nadie va a dar uso, de pequeños pedazos de civilización que se han perdido y que nadie sabe cómo recuperar. Son escenas que se repiten una y otra vez a lo largo de una de las ciudades más grandes de los EE. UU. No estamos hablando de recovecos ignorados por hallarse en las inconvenientes e incómodas afueras, no, aunque a veces lo parezca porque aparecen rodeados de la nada. Algunos de los casos más espectaculares de grandes infraestructuras difuntas se encuentran en pleno centro de Detroit. Escenarios que podrían pertenecer a una película de ciencia-ficción apocalíptica, pero que son reales y yacen en plena espina dorsal de lo que una vez fue una de las metrópolis más importantes del mundo, la bandera de la infalible creación de riqueza del sistema. Ahora esa bandera sigue agitándose al viento, pero más bien como un trapo descuidado que se ha convertido en motivo de sonrojo para los profetas del "nada puede fallar". Personalmente, me llamó mucho la atención la frase de un vecino de Detroit que recogía un artículo: "cuando nos mudamos aquí hace diez años, le dije a mi mujer que iba a volver a fumar. Todo era tan apocalíptico que sentí la necesidad de volver a los viejos hábitos". Así es como una ciudad puede morir.
Resulta que -dejando a un lado a los asesinos, tanto a los ficticios como a los reales-, al parecer hay varios psicópatas que viven felices entre nosotros... de hecho, son bastante exitosos. "Y destilan una malevolencia casi invisible, especialmente si son líderes empresariales. Pueden afectar al Capitalismo. Y creo que eso fue lo que vimos con la crisis bancaria: es capitalismo moldeado por una especie de psicopatía. Es extraordinario que los psicópatas puedan tener tanto poder, que puedan moldear toda una sociedad", le dijo Ronson a BBC Mundo. Lo que Ronson encontró y plasmó en su libro "A Psychopath Test" (El test del psicópata) era algo que varios psicólogos de renombre sospechaban desde hace tiempo y que al menos dos de ellos, el profesor emérito de psicología Robert Hare y el doctor Paul Babiak, psicólogo industrial y organizacional, ya habían puesto a prueba.
La primera vez que se vio al Hombre de Pekín fue en una excavación arqueológica en China en 1920 (el yacimiento de Zhoukoudian fue catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde el año 1987). Dos décadas más tarde se lo vio por última vez, cuando era embalado con destino a Estados Unidos en 1941. Las cajas desaparecieron y nunca se encontró rastros de ellas. Desde ese momento muchas teorías han rodeado a su contenido. Los restos fosilizados del Homo erectus pekinensis, o el Hombre de Pekín, pasaron los años treinta en China, donde desconcertaron a paleontólogos y antropólogos. Múltiples cráneos, mandíbulas inferiores y dientes se encontraron en una excavación en las afueras de la ciudad de Pekín, hoy llamada Beijing. Los primeros fósiles del Homo erectus se encontraron en Java en la década de 1890, pero algunos científicos creían que no eran más que una especie inusual o deformada de mono. El Hombre de Pekín puso fin a esa línea de pensamiento y fue reconocido como un tesoro cultural y científico.
Los vecinos de Villa Zorraquín vieron como un fenómeno luminoso azul intenso se desplazaba a gran velocidad para luego detenerse y realizar la misma trayectoria. Dicen que pudo haber despegado de un estancia, dónde exisitiría un campo magnético. "Eran luces muy intensas con cuerpo propio de ningún artefacto conocido fabricado por el hombre, tampoco se trataba de ningún avión simplemente era un fenómeno luminoso de gran intensidad", confió el testigo directo que capto la fotografía y decidió compartirla tal como hizo con sus contactos en Facebook. Asegura que el avistaje "duro algunos minutos y se produjo cerca de las 21 horas, luego desapareció pero duró el tiempo necesario y suficiente para tomar la fotografía con una cámara digital hogareña sin luz y apuntando al cielo".
Se habría formado el 2 de septiembre pero fue desintegrada por una onda interplanetaria de viento solar. Las sondas espaciales gemelas Van Allen han descubierto otro anillo de radiación que rodeó a la Tierra el año pasado antes de que lo aniquilara una poderosa onda interplanetaria, según un artículo que publica hoy la versión impresa de la revista Science. Ese anillo, hasta ahora desconocido, ha revelado la existencia de estructuras y procesos inesperados dentro de estas peligrosas regiones del espacio donde la radiación solar encuentra los campos magnéticos del planeta. Las sondas gemelas de la NASA estudian esos cinturones de radiación. Después de que el hombre empezara a explorar el espacio exterior, uno de los primeros hallazgos fue en 1958 el de los cinturones de radiación bautizados en honor de su descubridor James Van Allen, que consisten en partículas de energía altamente cargadas y atrapadas en campos magnéticos.
Según el observatorio ruso ISON-NM, la colisión dejaría un gigantesco cráter de 500 km de ancho y 2 km de profundidad en el planeta rojo. El cometa C/2013 A1, más conocido como 'Siding Spring', podría chocar contra Marte el 19 octubre de 2014. De acuerdo con el trabajo realizado por el observatorio ruso ISON-NM durante 74 días, el cometa impactaría violentamente en el planeta rojo a una velocidad de 56 kilómetros por segundo, liberando una energía de 20,000 millones de megatones y dejando un cráter de 500 km de ancho y 2 km de profundidad.
El presidente de EE.UU., Barack Obama, ha firmado el secuestro fiscal, lo que, según los expertos, podría afectar también a otras regiones como América Latina, cuyos ciudadanos trabajan en EE.UU. y envían remesas a sus países de origen.
España - Un diente de leche de un homínido de 1,4 millones de años de antigüedad ha sido hallado en una zona arqueológica de Granada (España), convirtiéndose en la prueba de presencia humana más antigua de Europa Occidental. Este diente de leche del homínido denominado 'Niño de Orce' fue hallado en Barranco León de Orce durante las excavaciones realizadas en julio de 2002 junto a otras piezas dentales de herbívoros, pero hasta ahora no había sido dado a conocer tras una serie de prolongados estudios necesarios para comprobar su antigüedad. El profesor del Instituto Catalán de Paleoecología Humana Bienvenido Martínez Navarro ha calificado Orce como "el registro paleobiológico más importante de Europa" y ha recalcado que ningún otro lugar ofrece tantos restos ni tan bien conservados, lo que permitirá conocer cómo eran hace miles de años los humanos. "En la excavación aparecieron 1.244 piezas, la mayoría de siles y calizas, una muestra de la industria lítica que demuestra la presencia humana en la zona", agregó Isidro Toro Moyano, director del Museo Arqueológico de Granada.
Un enorme sumidero de unos 30 metros de diámetro se abrió bajo el dormitorio de un hombre y se lo tragó con todos los muebles. Jeff Bush, de 37 años, desapareció bajo los escombros después de que su casa en Brandon, EE.UU., se hundiese en un agujero de 15 metros de profundidad. Cuando el hombre gritó pidiendo ayuda, su hermano Jeremy saltó al agujero para tratar de ayudar, pero no pudo encontrarlo y tuvo que ser rescatado.